Hace unos meses todavía era la hija
pequeña de mamá, aún me quedaba la talla 14 y no me importaba usar tenis azules
con un short rosa y una blusa roja, no me había enamorado de Gustavo que tiene
los ojos más hermosos del mundo, no me importaba gastarme los pocos y pobres
$10 que mi padre me daba para una semana y, sobre todo, no me importaba
tener un cuerpo lindo, ser la más bonita de la escuela y la más popular
con la ropa de moda de hoy.
Pasar de una etapa a otra, fue en en un
abrir y cerrar de ojos, tan rápido que comenzó un nuevo día.
Y así inicié el día, con no sé qué ponerme,
tengo una falda Forever 21 que se ve hermosa, pero también tengo un vestido
Bershka con el que seguro conquisto a Gustavo. Por fin, bajo a la cocina
con mis jeans favoritos de DC, desayuno a las carreras un rico Jugo de
Valle y cereal Fitness, me voy en mi Seat que -por cierto- ya está un poco
pasado de moda.
Llego a la escuela y lo primero que veo es
la hermosa sonrisa de Gustavo, que luce esa chamarra H&M, que por
cierto se le ve ¡wow!, Después de una horas de clase salimos despavoridas,
porque en verdad no quiero hacer tarea, casi se termina mi Scribe, y no quiero
ir al Office Depot.
Comeré esta tarde con mamá en Benedettis,
se le antojó hoy una pizza y quiero complacerla, porque en verdad quiero ir de
antro a Gravity y lucir mi vestido nuevo de Pull and Bear.
Llega el viernes -por cierto, el mejor de
todos- porque por fin Gustavo me invitó a salir y qué mejor si es a ir a
Cinemex y después a Cielito Querido, para que por fin se me declare...
Y así transcurren los días de una
adolescente, con eventos que marcarán esa etapa importante, acompañados de
marcas que serán parte de su vida al tener el impacto emocional, convirtiéndose
sus Love Mark (posicionamiento de amor de una marca dentro de la vida del
consumidor).
Cada uno de nosotros vivimos esa etapa con
mucha pasión por las cosas queríamos hacer, buscábamos libertad y autonomía.
Aún recuerdo cómo impactaron mi vida aquellas marcas como Converse con los que
buscaba una identidad, y hoy forma esa marca parte de mis recuerdos y
experiencia.
Y a ti ¿qué marcas siguen siendo parte de
tu vida que estuvieron desde la adolescencia?
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